martes, 16 de abril de 2013

La sombra y mi mujer.


Dormía solo bajo una nube de plumas
Soñaba con el sexo del viento y el fuego
Creaba historias colores
Lloraba por labios de sabores


Ayer dormí con un hombre
Me  revolqué toda la noche
Sin conciencia ni reproche
Sentía su presencia bien marcada en mis cuatro paredes
Era mi sombra
Tan oscura
Tan pesada como mi alma
 Y de a pocos subía la temperatura
Sabiendo que el infiel era el
Sabiendo que en una noche
Mi vida no era basura


Hoy mi sombra tiene nombre
Y forma de mujer
Y todas las noches
Duermo con ella y disfruto el placer
De verla dormir
De sentir sus latidos en mí pecho
Y contemplar su belleza mística
Al acostarme
Y al levantarme
Tengo un solo nombre en mi cama
Es el de mi amada que quiere besarme
Eternamente en un minuto
Un minuto para la eternidad

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